Nick V. cuenta a #SeaFoam:
“Le compré esta vieja camioneta Ford a un granjero por un precio bastante bajo. La camioneta estaba en terribles condiciones, pero funcionaba. Tenía casi 200,000 millas y el ralentí era irregular. Lo primero que hice fue agregar Sea Foam Alto Kilometraje al aceite, y me sorprendió lo que salió: el aceite más negro que jamás haya visto en mi vida. Me impresionó cómo mejoró el rendimiento al utilizar Sea Foam en el aceite. La potencia y el ralentí mejoraron considerablemente”.